El reto de implementar las actividades preventivas en la práctica clínica

 

Ya están disponibles las recomendaciones preventivas del PAPPS 2022 publicadas en el suplemento especial de la revista Atencion Primaria. Los grupos de trabajo del PAPPS de semFYC han hecho un gran esfuerzo en la actualización de las recomendaciones, y tenemos que felicitaros todos por los resultados conseguidos. Somos un programa preventivo líder en muchos de los campos de prevención y promoción de la salud, y nuestras recomendaciones son leídas y tenidas en cuenta. ENHORABUENA A TODOS-TODAS.

El suplemento se acompaña de una editorial sobre el reto de implementar las actividades preventivas en la práctica clínica. Además de elaborar recomendaciones en actividades preventivas, la editorial propone ir un paso más allá y abordar el tema de la implementación de las actividades preventivas en Atencion Primaria. Siguiendo el argumentario de una anterior entrada del blog Implementación de las actividades preventivas en la práctica clínica. El Libro Verde del RACGP, se reflexiona sobre la práctica de la medicina y la enfermería familiar y comunitaria, considerando que la implementación y la prestación de servicios preventivos es variable y muchas veces insuficiente. No es solo nuestro conocimiento médico lo que puede afectar negativamente nuestra capacidad para brindar atención preventiva. Más bien es nuestra capacidad para reconocer y superar una combinación de factores individuales (falta de tiempo, atención a otras demandas de atención, y nuestros niveles de habilidad y actitud ante la prevención) y los sistemas de práctica clínica y factores organizacionales (por ejemplo, el trabajo en equipo, la claridad de roles en prevención, la falta de recursos, y una cultura centrada en el tratamiento más que en la prevención). Aplicar las recomendaciones preventivas en la práctica requiere conocimiento en áreas que no nos enseñan bien, como la ciencia de la implementación, el manejo del cambio, la cultura de la organización sanitaria, y la recopilación y el análisis de datos.

Para poder implementar las actividades preventivas necesitamos liderazgo de nuestras autoridades sanitarias, desarrollar la capacidad para el cambio, crear una cultura de mejora continua de la calidad, elegir los procesos relevantes que necesitan cambios, y que los centros de atención primaria puedan organizar su entorno para prestar servicios preventivos. 

Todo un reto por delante.

Paco Camarelles