¿Qué
le digo a un paciente que quiere perder peso?
Este
es un asunto complejo, que requiere un tiempo del que no siempre disponemos y sobre
el que, a veces, pensamos que es casi una “misión imposible”. Trabajando en Atención
Primaria, desde hace cerca de tres décadas, he invertido la mayor parte de mis
esfuerzos formativos y de mi actividad asistencial en trabajar sobre
alimentación, y mi impresión es que la pérdida de peso es algo factible, pero
los continuos cambios de consulta no me habían permitido observar si estas
bajadas de peso se mantenían a lo largo del tiempo.
Hace dos años realicé una revisión de los
artículos, guías y directrices sobre su abordaje, que ahora se acaba de
publicar en la revista Enfermería Clínica: ENFERMERÍA
BASADA EN LA EVIDENCIA. REVISIÓN.Sobrepeso y obesidad: eficacia de las intervenciones en adultos y sí, las
dietas de restricción calórica consiguen bajadas de peso de 4-29 kg, pero los
estudios de seguimiento muestran que a los 4-7 años de la finalización, del
29-64% de los participantes habían recuperado todo el peso, o más, sin
encontrarse mejoras de salud más allá del cambio de peso.
Por
eso ahora, mi enfoque se centra
en el cambio de hábitos y los objetivos que pactamos los fijamos en términos de
salud en lugar de la pérdida de peso. Siguiendo el planteamiento de Eva Lamote
de Griñon, en el proyecto ATTCCAPO (Aplicación de Técnicas para el Cambio de Conducta en el Paciente Obeso), los objetivos son aprender a comer
regularmente, programar actividades físicas para disfrutar, no para perder
peso, desarrollar habilidades mentales (como identificar sentimientos y
necesidades o aprender a desarrollar pensamientos positivos) y habilidades
corporales (aprender a aceptar el propio cuerpo y aprender a cuidarse).
Normalmente
pido a la persona, que quiere o debe realizar una modificación de sus hábitos
alimenticios, un registro de su alimentación durante una semana, lo más completo
y detallado posible, y a partir de él trabajo sobre este esquema, que elaboré
tras la revisión
Respondiendo
a la pregunta planteada, les digo a mis pacientes que vamos a trabajar sobre
cómo mejorar su alimentación y su estilo de vida en conjunto, que tenemos que
revisar cómo come, pero también cuanto se mueve, su consumo de alcohol, por las
calorías que éste puede aportar y otros elementos, como el sueño, todo con un
objetivo: mejorar su salud. El cambio de peso es solo un efecto “secundario"
Juana Gomez Puente. Grupo de educación sanitaria y promoción de la salud del PAPPS.
No hay comentarios:
Publicar un comentario