Nuevo
año, vida nueva. Pero ¿Funcionan realmente los propósitos de cambio de conducta
en salud para el nuevo año? El "efecto de nuevo comienzo", sugiere
que el nuevo año puede ser un buen momento para hacer propósitos y cambiar a
conductas de salud más sanas, porque puede actuar como un "punto de
referencia temporal" que da a las personas un compromiso renovado con las
metas. Eventos como Año Nuevo, cumpleaños, días festivos o incluso el comienzo
de una semana o un mes se asocian con un aumento de propósitos de cambio de
comportamiento. Estos "puntos de referencia temporales" permiten a
las personas dividir su percepción del tiempo en "antes" y
"después", y descartar los fracasos anteriores como responsabilidad
de un yo pasado (1).
Se ha
publicado recientemente una noticia en Livescience sobre este tema: Do New Year’s resolutions really work?, que
nos aporta datos interesantes.
La
clave para una resolución exitosa de un propósito de Año Nuevo puede residir en
establecer nuevas metas, en lugar de romper los malos hábitos. El estudio A
large-scale experiment on New Year's resolutions: Approach-oriented goals are
more successful than avoidance-oriented goals (2) de 2020, encontró que el
55 % de los participantes tuvieron éxito en mantener sus resoluciones de Año
Nuevo del año anterior. Sin embargo, los participantes con objetivos orientados
a hacer algo nuevo tuvieron un éxito significativamente mayor que los que tenían objetivos orientados a la evitación (dejar de hacer algo), con una tasa de
éxito del 58,9 % frente al 47,1 %. Esto indica que aquellos que asumen nuevos
desafíos tienen más probabilidades de éxito que aquellos que intentan eliminar
algo de sus vidas. Esto no significaba que los participantes que
establecían objetivos de evitación, como dejar de fumar o perder peso, no
tuvieran éxito, sino que la probabilidad de que los participantes tuvieran
éxito con sus resoluciones era mayor cuando el objetivo se orientaba a hacer
algo nuevo.
Pero
hay otros condicionantes psicológicos que puede afectar a la forma en que las
personas responden a sus resoluciones de Año Nuevo:
- La llamada 'brecha entre la intención y el comportamiento'". No es suficiente sentirse muy motivado para cambiar, también necesitamos tener las habilidades para manejar nuestro comportamiento y la oportunidad de hacerlo realidad. Los cambios en las actitudes, normas y la autoeficacia conducen a cambios en el comportamiento (3).
- La voluntad de cambiar es un factor importante para realizar cambios con éxito, y es necesario que la persona esté lista para comprometerse (4).
- Hacer social el cambio puede ayudar a alcanzarlo. Una dinámica de grupo puede ayudar a mantener a las personas motivadas para una tarea y tener más éxito (5).
- Tener un objetivo específico en mente y un plan para lograrlo puede aumentar la probabilidad de éxito. Aquellos que hacen un propósito de Año Nuevo tienen un 44 % más de probabilidades de lograr esa meta después de seis meses que aquellos que no lo hicieron, pero estaban interesados en cambiar un problema más tarde (6).
- Los hábitos pueden ayudar a las personas a cumplir sus objetivos incluso cuando su motivación personal o fuerza de voluntad es baja (7). El cerebro humano funciona más creando rutinas que formulando metas o deseos personales cuando los niveles de motivación son bajos. Por lo tanto, crear un hábito y repetir tareas podría ser una forma útil de evitar la falta de motivación.
"Las
resoluciones de Año Nuevo son una tradición en la que las personas se proponen
objetivos o metas para el próximo año, con la idea de mejorar algo en sus vidas
o alcanzar algún logro. Si bien no existe una respuesta única sobre si las
resoluciones de Año Nuevo funcionan o no, depende en gran medida de la actitud
y el esfuerzo que ponga cada persona en cumplir sus objetivos.
Algunas
personas pueden tener éxito en cumplir sus resoluciones de Año Nuevo, mientras
que otras pueden tener dificultades para mantener el impulso y la motivación
necesarias. Lo importante es tener una actitud positiva y ser persistente, ya
que es común que las resoluciones de Año Nuevo se abandonen a medida que avanza
el año. También puede ser útil establecer metas alcanzables y tener un plan
para alcanzarlas".
Una respuesta muy acertada.
Paco Camarelles
[1] The Fresh Start Effect:
Temporal Landmarks Motivate Aspirational Behavior. https://papers.ssrn.com/sol3/papers.cfm?abstract_id=2204126
[2] A large-scale experiment on
New Year's resolutions: Approach-oriented goals are more successful than
avoidance-oriented goals https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/33296385/
[3] The impact of changing
attitudes, norms, and self-efficacy on health-related intentions and behavior:
A meta-analysis. https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/27280365/
[4] Factors influencing readiness
to change in patients with alcoholic liver disease: A cross-sectional study https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/32667735/
[5] The Köhler Group Motivation
Gain: How to Motivate the ‘Weak Links’ in a Group https://compass.onlinelibrary.wiley.com/doi/abs/10.1111/j.1751-9004.2010.00333.x
[6] Auld lang Syne: Success
predictors, change processes, and self-reported outcomes of New Year's
resolvers and nonresolvers https://onlinelibrary.wiley.com/doi/abs/10.1002/jclp.1151
[7] How do people adhere to goals
when willpower is low? The profits (and pitfalls) of strong habits https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/23730907/
No hay comentarios:
Publicar un comentario